La cadena de frío: ese “ingrediente” invisible que también llega a tu cocina
- Los Colonos del Norte
- hace 18 horas
- 2 Min. de lectura
Mantener la cadena de frío no es solo una obligación sanitaria, es la base para conservar la calidad, seguridad y trazabilidad de cada proteína que llega a tu cocina.
En gastronomía profesional, hablamos mucho de cortes, gramajes, cocción perfecta y experiencia del cliente. Pero hay un elemento que nunca se ve en el plato, aunque influye directamente en su calidad: la cadena de frío.
Mantener una temperatura controlada desde que la carne sale de la planta hasta que entra a la cocina no es un detalle técnico. Es una garantía de calidad, seguridad y trazabilidad.
¿Por qué es clave cuidar la cadena de frío en cada despacho?
Evita la pérdida de propiedades del producto: sabor, textura y color.
Protege la inocuidad alimentaria, especialmente en proteínas sensibles como el pollo, el pavo o el cordero.
Asegura la vida útil real del producto en tu cocina.
Respalda la trazabilidad en caso de auditorías o exigencias sanitarias.
Evita mermas por producto dañado o temperaturas mal controladas.
En resumen: la cadena de frío es lo que permite que un producto de alta calidad llegue como debe llegar.
En Los Colonos del Norte, esto no es opcional. Es parte del estándar.
Contamos con cámaras de frío calibradas y monitoreadas.
Cada despacho se gestiona bajo protocolos de trazabilidad y conservación.
Entregamos productos congelados o refrigerados según necesidad, sin romper la cadena.
Nuestro equipo de logística conoce el producto y entiende lo que está en juego.
Un producto bien transportado, se valora.
Porque en una cocina profesional, un corte premium que llega con 3° de más… ya no es premium. Y un proveedor que cuida eso, cuida tu cocina.
Los Colonos del Norte. Calidad que se transporta con estándar.
